EL camino al cielo es un mensaje religioso, es un mensaje que nace del quehacer moralista de quienes luchan contra el pecado como el foco de infección social de las sociedades modernas; el camino a Dios es el mensaje bíblico, es el mensaje que fue presentado por Jesús en su Revelación de que Él es el camino para que el hombre y la mujer encuentren redención por causa de su actitud de desobediencia.
La existencia de un Cielo como destino final de quienes abracen una fe, sin contar con que es el lugar de comunión con Dios es un mensaje egoísta, ateo de por sí. Dios es el Creador de todas las cosas creadas y por quien todas ellas subsisten, por lo tanto el mensaje del Evangelio no es para evadir la responsabilidad de confrontar nuestra real posición ante Dios, el hombre vive alejado de Dios, ha sido su decisión, y debe confrontarse a sí mismo que tal decisión lo separará eternamente de Dios, mientras viva terrenamente tiene la oportunidad de decidir sobre su paradero eterno.
El mensaje del Evangelio es el mensaje de impacto que despierta al hombre y a la mujer del estado hipnótico bajo el cual vive a expensas del reino de las tinieblas, el mensaje del Evangelio les descubre la Revelación de que por Jesús recuperamos la eterna comunión con Dios, y nos libramos de los nexos con las tinieblas.
El cielo no es el lugar de escape de este siglo pervertido, es el retorno al lugar de partida, es la recuperación de la esencia misma por la cual el hombre y la mujer subsisten como seres creados a imagen y semejanza del Señor, pero es necesario tomar la decisión de vivir por la fe en Jesús, es el único camino.
En la casa de mi Padre muchas moradas hay: de otra manera os lo hubiera dicho: voy, pues, a preparar lugar para vosotros. Juan 14:2
El hombre y la mujer salieron de Dios, fueron formados a su imagen y semejanza, concebidos no por el capricho divino, sino por la decisión soberana en Él de formar seres aunque espirituales, diferentes en esencia de los ángeles y demás otros seres angélicos del tipo Elohim; todo, para mostrar por su decisión que Él aunque no comparte Su Gloria con nadie, formó seres “idénticos” a Él en carácter por quienes los otros seres formados pueden identificar en Él un a Dios benigno y misericordioso.
El único ser que no pudo tolerar esta decisión de Dios fue Luzbel, quien con su decisión de intolerancia introdujo tinieblas a través de sus actos, y seduce a los hombres para identificar en Dios a un ser al servicio del hombre, por eso la primera escusa del hombre rebelde ante su desgracia, pregunta: ¿Por qué si Dios es bueno permite que haya tanta maldad sobre la tierra?
Dios no está al servicio del hombre para satisfacer sus necesidades, ni siquiera para satisfacer sus inquietudes; Dios es el Creador de todas las cosas creadas, y ha determinado un día de juicio por causa de la negligencia del hombre de querer volver a Él, por eso las Escrituras atestiguan, y es el mensaje del Evangelio: Si oyereis su voz hoy, No endurezcáis vuestros corazones. (Hebreos 3:15; 4:7; 2 Crónicas 30:8; Salmos 95:8)
Es hora de volver a Dios, no retrases tu decisión, mañana puede ser demasiado tarde.
Las citas bíblicas son tomadas de la Versión Reina-Valera Antigua, 1909 (RVA)
Pastor Pedro Montoya
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