Vosotros sois la luz del mundo: una ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder. Mateo 5.14
¿Puede el mal triunfar sobre el bien?
A veces pareciera que sí; y en los momentos cuando eso sucede nos parece como si Dios mismo nos ha dado la espalda. ¿Por que nos asalta esa sensación?
La razón es sencilla,
- Nuestras convicciones están siendo confrontadas, o se están muriendo; o,
- Nos impusieron «otros» intereses y no nos hemos dado cuenta.
La verdad es que el mal no puede triunfar sobre el bien, pero a la hora de sufrir la sensación de que estamos completamente solos, entenderlo es bien complicado. Para evitar caer en esa trampa satánica, cuida tus convicciones, tu visión, y no aceptes intereses que no sean los del Reino:
Ten presente lo siguiente: Una ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder… a menos que decidan apagar la luz.
Pastor MONTOYA